Ermita de Santo Toribio de Liébana (Alloza)
Apenas quedan huellas de esta ermita, que se levantó sobre un promontorio, en un paraje conocido como el Santo. Es la más alejada (a una media hora de distancia), la menos conocida y más recóndita de las ermitas de Alloza, pero desde ella se disfruta de un extenso panorama: Ariño y Alacón a lo lejos, los montes de San Cristóbal, Santa Bárbara y el Calvario, además del núcleo urbano de Alloza. Con capacidad para unas doce personas, se construyó en la segunda mitad del siglo XVII y varios testamentos dispusieron la celebración de misas en su altar, que en 1849 todavía estaba “habilitado para celebrar”.
Santo Toribio de Liébana se asocia con el monasterio cántabro que lleva su nombre, donde según la leyenda se conservan las importantes reliquias que trajo de Jerusalén, antes de ser nombrado obispo de Astorga. La devoción a este santo es poco frecuente en la provincia turolense, aunque muy destacada en Estercuel.
Bibliografía
- Lerma Loscos, Josefina, “Iglesias y ermitas de Alloza desaparecidas”, en Revista de Andorra, n.º 14, Centro de Estudios Locales de Andorra, 2015, pp. 52-71.
- Lerma Loscos, Josefina, "Ermitas y capillas de la comarca Andorra-Sierra de Arcos. Ermitas y capillas de Alloza", BCI (Boletín de Cultura e Información de la comarca Andorra-Sierra de Arcos)n.º 36, Andorra, CELAN-Comarca Andorra-Sierra de Arcos, junio 2020, pp. 24-29.