por José Antonio Pastor Montañés

La bella Suiza se interpreta para terminar el dance de Alloza, justo antes de la jota final, y lo primero que hay que decir de este vals es que tal vez sea la melodía más bonita de entre todas las que hemos encontrado en los dances de la zona.
La partitura se conserva, entre muchas otras, en una carpeta que perteneció a Manuel Lorenz Millán y la pudimos consultar gracias a la amabilidad de su hijo Inocencio, al que estamos muy agradecidos; el citado músico tocó el saxofón en la banda de música de Alloza y con el mismo instrumento acompañó al dance en los años 80. En la actualidad se toca con dulzaina, por lo que fue preciso modificar la tonalidad de la partitura.
La Orquestina del Fabirol incluyó en su disco Acumuer (Sonifolk, 2001) la pieza titulada “Testamento de a terra dolenta”, que está inspirada en esta melodía.
Bibliografía
- Pastor Montañés, José Antonio, "La bella Suiza-vals (Dance de Alloza)", Boletín de Cultura e Información (BCI) n.º 17, Andorra, CELAN, invierno 2009.