Se inauguró en la Casa de Cultura de Andorra la exposición “Leche de pájaro”, de Aura Olahut. Sueños, pensamientos, obsesiones, recuerdos de infancia, la luz de España y la pasión por el color se expresan en estas 17 pinturas. Son vivencias, recuerdos con historias detrás, personajes de obras literarias o de cine que han dejado huella en la vida de Aura. Estas fueron las palabras de Rosa Espés en la presentación, respondidas por Aura con el agradecimiento por compartir pedacitos de su vida en la sala con amigos, familia y gente de Andorra; una aventura artística respaldada por la Casa de Cultura.

 

Aura nos dijo que sus obras son cosas que odia, ama, que sueña con ojos abiertos o cerrados, cosas que le atraen o le asustan, que mira como un niño por la mirilla de la puerta.

Su amigo poeta, Juan José Bielsa, plasmó en una poesía algunos de esos sentimientos que producen la exposición “Para Aura Olahut, pintora rumana y aragonesa” y en sus palabras habló de pintar paisajes del alma, primaveras y paraísos alegres; él miró sus cuadros con ojos de poesía y concluyó diciendo que tras las sombras, brilla el día.

El título de la exposición, Leche de pájaro, es un postre rumano, con el que nos invitó a los asistentes; nos explicó que puso ese título porque le recordó lo que en Rumanía se les dice a los niños, que ese postre se lo ha traído un pájaro; al igual que los niños no lo ven, tampoco Aura ve en su vida muchas cosas, o las que ve no las termina de entender, una mezcla, como en sus pinturas, de amor y miedo.

Vi la exposición con una niña de siete años, ella veía el color.

Permanecerá todo el mes de mayo.

TEXTO Y FOTOS: Pilar Sarto