Los hijos de cualquiera
La compañía madrileña Producciones Bernardas abrió el ciclo de teatro “Mujer en escena” con la obra: Los hijos de cualquiera, homenaje a las madres gallegas en su lucha contra el narcotráfico en los 80. La andorrana Aldara Molero Balselga, cofundadora de la compañía, guionista de la obra y encargada de la dirección y dramaturgia de esta representación teatral con Natalia Mariño, fue una de las actrices junto a Maite Colodrón, María Herranz, Irene Maquieira y Marta Megías.

Es la historia de la asociación Érguete (nacida en 1984) y de las madres que durante los años 80 libraron -y vencieron- una batalla desigual contra el narcotráfico. Al investigar y documentarse, vio que había que llevar al teatro esta lucha, que durante 10 años trabajó sin descanso y consiguió desenmascarar el narcotráfico oculto denunciando a los grandes traficantes, haciendo que el problema entrara en la agenda política y organizando planes integrales de rehabilitación y reinserción. Además de lograr pequeños éxitos como el embargo de los pazos comprados por narcotraficantes para terminar siendo de titularidad pública y lograr que empresas asociadas a la reinserción de jóvenes tuvieran cabida, lograron cambiar la percepción social y transformar las leyes y las actuaciones policiales y judiciales. Ellas estuvieron muy presentes en el Plan Nacional Contra las Drogas, hicieron que se empezara a hablar de VIH, que hubiera medidas preventivas en las cárceles, charlas de prevención etc.

Érguete es hoy en día una Fundación que trabaja en prevención e intervención en conductas adictivas y una gran empresa gallega cuyo principal motor es la reinserción de personas que han sufrido drogodependencias.
Para Aldara, es la pieza con la que más se identifico como creadora. Reconoce que la historia, la investigación y el proceso emocional de ensayar los personajes ha sido muy dura. “No es teatro documental ni contamos la historia de cinco mujeres en concreto, sino que fundimos muchas historias reales en cinco mujeres de ficción. Desde los primeros “mi hijo está raro” hasta que los funerales empiezan a ser habituales, contamos todo ese proceso que llevó a las mujeres a plantarle cara al narcotráfico, reunirse en el bar donde se vendía la droga o ir a hablar con el presidente de la Xunta Galega”
La asociación tiene una página web muy interesante en la que se puede ver el vídeo “La hormiga que venció al elefante”, con testimonios interesantes de una de las fundadoras, Carmen Avendaño, que explica algunas de las acciones como convocar una asamblea multitudinaria y denunciar 36 bares que vendían heroína; ponerse en las puertas de esos bares y comercios para que no entrara nadie y sacar a la luz la realidad desenmascarando lo que estaba oculto y el poso social de mito, leyenda, envidia e impunidad que mantenía la situación. En el documental se hace referencia a las fotos de Feijoo con Marcial Dorado, narcotraficante vinculado con la alta política y sociedad.
El público asistente disfrutó de la obra. ¡Enhorabuena, Aldara!
El ciclo está financiado por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 a través de la Federación Española de Universidades Populares.
Fotos: Rosa Pérez.